Intel ha hecho cambios en sus planes a futuro con el objetivo de competir contra las compañías fabricantes de chips de bajo poder. El primer paso es la creación de un chip basado en Broadwell, una micro arquitectura que será la sucesora del diseño Haswell. El procesador será un SOC, lo que lo distinguirá de otros productos Xeon de Intel. El nuevo chip debería aparecer en algún momento de 2014, todavía no se conoce su nombre. El chip se fabricará en 14 nanómetros con un I/O integrado, red de trabajo y aceleradores para aplicaciones.
Los SOC reúnen varios componentes en un solo chip con el objetivo de reducir el consumo de energía y la necesidad de espacio. Será el primer SOC que empleará la misma arquitectura que los chips Xeon.
Diane Bryant, manager general de la división de centros de datos y sistemas de grupos conectados, ha señalado que de esta manera la empresa ofrece lo mejor de dos mundos: un gran rendimiento y alta densidad.
Debe estar conectado para enviar un comentario.